EL ORIGEN DE LA MISERIA Y EL ATRASO EN BOLIVIA

Por Vladimir Ramírez T.

Marzo 2003.- El desarrollo es la mejora del bienestar humano. La mayoría de la población de todo el mundo aspira hoy en día a un nivel de vida más alto, a un periodo de existencia más largo y a tener mejor salud; aspira además a una mejor educación para sí mismos y para sus hijos, con lo cual se incrementará los ingresos, permitiendo ejercer un mayor control sobre sus propias vidas; quiere también cierta estabilidad y mayor tranquilidad, y la oportunidad de ocuparse de cosas que le produzcan placer y satisfacción.
La brecha existente en bienestar entre los países de bajos ingresos y los industrializados es enorme y muy evidente pero, ¿Qué es lo que explica esta disparidad? ¿Qué han hecho los países industrializados que no han hecho los países de ingresos bajos? ¿Qué es lo que produce el desarrollo?
Algunos dirán que los países pobres no han explotado a otros países para ser ricos, que los países pobres están así porque los otros son ricos, tal como lo afirma la teoría marxista, que goza de gran aceptación en los países pobres del tercer mundo.
En efecto, los poderes coloniales obtuvieron con frecuencia grandes ventajas económicas de sus colonias y por ejemplo, las compañías norteamericanas han ganado mucho dinero en América Latina y en el Tercer Mundo, particularmente, durante la primera mitad de este siglo. Pero el enfoque casi exclusivo sobre "el imperialismo" y la "dependencia" para explicar el subdesarrollo ha alentado al desarrollo de una mitología paralizante y derrotista.
En realidad, progresan más rápidamente las sociedades que obtienen más éxito en ayudar a su pueblo, en poner en práctica su potencial creativo. Lo que produce el desarrollo es nuestra capacidad creativa para imaginar, teorizar, conceptuar, experimentar, inventar, articular, organizar, administrar, resolver problemas y hacer cientos de otras cosas con nuestras mentes y manos y que contribuyen al desarrollo de la humanidad en general.
Es cierto también que los recursos naturales, el clima, la geografía, la historia, el tamaño del mercado, la política de gobierno y muchos otros factores influyen en la dirección y ritmo del progreso. Sin embargo, el motor principal es la capacidad creativa humana.
Sin embargo, es innegable que la sociedad que tenga más éxito en ayudar a su propio pueblo, a todo su pueblo, a poner en práctica su potencial creativo es la sociedad que progresará más rápidamente.
No es simplemente el empresario quien crea el progreso, aun si hablamos estrictamente de progreso material, del económico. El inventor de la máquina utilizada por el empresario; el científico que concibió la teoría que el inventor llevó a la práctica; el ingeniero que diseñó el sistema para la producción en masa de la máquina; el agricultor que pone especial cuidado en producir una materia prima uniforme que será procesada por la máquina; el operador de la máquina que sugiere algunas modificaciones útiles para el dispositivo, basándose en su amplia experiencia para operarla, todos están contribuyendo al crecimiento. Así, el vendedor que amplía la demanda del producto concibiendo para ella un nuevo uso. Así también los maestros que interesaron a los científicos, al inventor y al ingeniero en sus profesiones y que le enseñaron agronomía al granjero.
La producción tiene lugar dentro de una sociedad más amplia y la forma en que ésta funciona afecta al proceso productivo.
Un buen gobierno puede garantizar estabilidad y continuidad sin la cual la inversión y la producción sería difícil. Un buen gobierno puede proporcionar una serie de servicios que faciliten la producción. Y la política que aplica el gobierno con respecto a la tributación, los tipos de interés, los precios de soporte para la producción agrícola, afectará en gran medida las decisiones del productor. Así pues, la creatividad y la capacidad de los funcionarios de gobierno desempeñan un papel clave en el desarrollo económico. De hecho se puede afirmar que un ministro de hacienda o un eficaz político de gobierno vale por muchos Henry Fords..
Pero la definición del desarrollo es mucho más amplia que una simple dimensión productiva de la existencia humana. También abarca la dimensión social, en particular, la salud, la educación y el bienestar. Es el gobierno quien tiene la principal responsabilidad en el progreso de estos sectores y, al igual que con el progreso económico, la innovación y la creatividad constituyen las bases del progreso social. Aquellos que conciben una política que mejora y amplía los servicios sociales son comparables en su impacto evolutivo con los empresarios industriales, como son los planificadores del sector público, los administradores, los técnicos y los trabajadores u obreros, respecto de sus contrapartidas del sector privado. No es difícil ver cómo esta opinión de lo que causa el desarrollo se puede extender a prácticamente todas las formas de trabajo, físicas e intelectuales, realizadas en una sociedad. Es obvio que la contribución de unos será mayor que la de otros y aunque el papel de la gente de talento puede ser enormemente importante, todos pueden contribuir. De este modo, es probablemente más exacto, al menos en el mundo contemporáneo, concebir el desarrollo más como un proceso donde intervienen millones de pequeños adelantos que solamente con el trabajo de genios. Una sociedad que allane el camino para estos adelantos, progresará.

Básicamente, creo que una sociedad fomenta la capacidad creativa humana en siete formas diferentes:

1. Mediante la creación de un ámbito en la que la gente espere y reciba un trato justo (En Bolivia no se da esto)
2. Mediante un sistema educativo eficaz y accesible: aquel que proporcione las herramientas intelectuales y vocacionales básicas, que alimente la curiosidad, las facultades críticas, el disentimiento y la creatividad y que facilite a la gente la solución a los problemas. (Tampoco existe en Bolivia tal sistema).
3. Mediante un sistema de salubridad que proteja al pueblo de enfermedades que debilitan y matan (Bolivia esta lejos de tener algo parecido)
4. Mediante la creación de un medio que fomente la experimentación y la crítica (inexistente en Bolivia)
5. Mediante la creación de un medio que ayude a la gente tanto a descubrir su talento e intereses y que los provea con trabajos adecuados (Ocurre exactamente lo contrario aquí, en Bolivia)
6. Mediante un sistema de incentivos que recompense el mérito y los éxitos (y por el contrario que desaliente el nepotismo y la "compadrerismo" ). Sin comentarios.
7. Mediante la creación de la estabilidad y continuidad que hacen posible planificar el futuro con confianza. El progreso se hace mucho más difícil con la inestabilidad y la discontinuidad, que es lo que exactamente hay en Bolivia.

LA RELIGIÓN Y SU FUNCION DE FRENO AL DESARROLLO

La visión que la sociedad tiene del mundo es la fuente de su sistema de valores y actitudes. Su visión del mundo está formada por un conjunto de influencias que incluyen la geografía, la organización económica y los caprichos de la historia. Ésta visión y éstos valores cambian constantemente, pero habitualmente a un ritmo muy lento, en décadas e incluso generaciones. Una parte importante de la visión del mundo en Bolivia y Latinoamérica se expresa mediante la religión.
Si el principal enfoque de una sociedad se encuentra en el pasado - en la gloria de tiempos pasados o en la reverencia a sus antecesores - o si esta está absorbida por problemas de supervivencia actuales como planificación, la organización y la inversión, que constituyen la urdimbre fundamental del desarrollo, no es probable que se sientan estimuladas, como es el caso de Bolivia
La orientación hacia el futuro implica la posibilidad de cambio y progreso. Esa posibilidad, según el pensador y filósofo alemán Max Weber en su obra "La ética protestante y el espíritu del Capitalismo", debe ser realizable en esta vida.
Los conceptos calvinistas de "vocación" y "predestinación" (elección) obligan a los ojos de los fieles a mirar hacia el futuro. Asimismo lo hacen los fundamentos básicos del judaísmo que se adhiere a la idea de progreso, afirmando que la edad de oro de la humanidad no está en el pasado, sino en el futuro.
Si la visión que la sociedad tiene del mundo fomenta la creencia de que los humanos tienen la capacidad de conocer y comprender el mundo a su alrededor, de que el universo funciona de acuerdo con un conjunto de leyes en gran medida descifrables y que el método científico puede abrir muchos secretos de lo desconocido, está impartiendo claramente un conjunto de actitudes estrechamente relacionadas con las ideas de progreso y cambio.
Si la visión del mundo explica los fenómenos mundanales por medio de las fuerzas sobrenaturales, con frecuencias en forma de caprichos de numerosos dioses o diosas que exigen obediencia al ser humano, queda poco espacio para la razón, la educación, la planificación y el progreso. Por ello precisamente, el subdesarrollo se ha apoderado de las sociedades latinoamericanas que mayoritariamente son católicas y mucho más de Bolivia, cuya visión fatalista es frecuentemente alimentada por la iglesia.
Muchas visiones del mundo propagan la idea de la igualdad entre los humanos. Sobre esto se hace más hincapié en unos sistemas éticos que en otros y obviamente está presente en el catolicismo y en el protestantismo. Según Max Weber el enfoque católico tradicional en la otra vida, en contraste con el enfoque protestante (y judío) en la vida terrena, vicia la fuerza del sistema ético, particularmente cuando ese enfoque está acompañado del ciclo transgresión -confesión - absolución.
Una consecuencia posible puede ser la orientación protestante algo más marcada hacia la igualdad y la comunidad y una orientación católica relativamente más marcada hacia la jerarquía y el individuo.
En el origen del éxito se encuentra un conjunto de valores y actitudes que asociamos con la ética protestante, a saber: trabajo, duro, honestidad, racionalidad, austeridad, en suma, "ascetismo". Particularmente las sectas protestantes influidas por el calvinismo se refuerzan mutuamente. El concepto calvinista de "llamada", el cumplimiento de las obligaciones impuestas al individuo por su posición en el mundo, la creencia de que Dios ha bendecido a unos pocos escogidos cuyo estado de gracia es evidente a través de su prosperidad debe haber sido la palanca concebible más poderosa para la expansión de esa actitud para con la vida
De todos modos, en Bolivia la iglesia suele actuar como una tremenda fuerza para obtener inercia social que fomenta la irracionalidad.

EDUCACION

En la actualidad existen pocos países, como Bolivia, que no puedan erradicar de cuajo el analfabetismo en una generación, de existir realmente la voluntad de hacerlo. Hay muchos ejemplos: Cuba, Costa Rica, Barbados, Trinidad y Tobago, todos los países de Europa y algunos de Asia que se propusieron instruir a su población y lo lograron exitosamente.
Con los actuales medios de comunicación y material humano no hay país que no pueda enseñar a su población a por lo menos leer y escribir. El vergonzoso alto índice de analfabetismo de Bolivia en pleno siglo XXI es una de los obstáculos principales para su desarrollo.
También es necesario tener en cuenta la crianza de los niños para explicar el desarrollo de los países. Los psicólogos han identificado tradicionalmente los primeros años de vida como el periodo en el que se forma en gran medida la personalidad. Se cree que, cuando se trata de la motivación para el éxito, los años entre cinco y doce son decisivos. Los valores que son pertinentes al éxito incluyen el anti-autoritarismo, un respeto por la vida y el rechazo de privilegios.

LA SOCIEDAD BOLIVIANA

Las cuestiones fundamentales del desarrollo y la orientación pasada u futura que tienen las sociedades en su visión del mundo están enmarcadas en tres factores culturales: su amplitud de la identificación con sus prójimos, el vigor de su sistema ético y su actitud sobre el trabajo. Estos tres factores prácticamente son fundamentales para el desarrollo de una sociedad, incluida la boliviana
Existen evidencias de que la familia es una institución efectiva para la supervivencia, pero un obstáculo para el desarrollo porque según Weber "El gran éxito de las religiones éticas, sobre todo de las sectas éticas y ascéticas del protestantismo, fue la de romper las cadenas de los lazos de sangre. Sin embargo, las consecuencias sociales de una extendida desconfianza pueden ser graves".
La ausencia de confianza en la cultura de la sociedad proporciona obstáculos formidables para la creación de instituciones públicas. Aquellas sociedades faltas de un gobierno estable y eficaz también carecen de la confianza mutua entre sus ciudadanos, en las lealtades nacionales y públicas y en la destreza y capacidad organizativa. Se dice con frecuencia que sus culturas políticas están marcadas por la sospecha, los celos y la hostilidad latente o manifiesta hacia cualquiera que no sea miembro de la familia, del pueblo o, quizás de la tribu o etnia. Estas características se encuentran en muchas culturas, cuyas mayores manifestaciones pueden estar en el mundo árabe y en América Latina, donde han prevalecido tradiciones de individualismo autocentrado y de desconfianza y odio contra otros grupos de la sociedad. En Bolivia esto ocurre hasta el día de hoy entre varias comunidades campesinas, entre collas y cambas, entre la población criolla y los indígenas etc.
Por el contrario, se abre todo un conjunto de posibilidades para el desarrollo y la cooperación de la sociedad si la confianza se extiende más allá de la familia. Un medio ampliado de confianza fortalece el desarrollo y las modernas técnicas de producción para la solución de problemas de toda la comunidad y para la estabilidad política. Y se fortalece ante todo la idea del compromiso, fundamental para el funcionamiento de un sistema pluralista y democrático.
La confrontación constante entre grupos de una misma sociedad socava la estabilidad y la continuidad, esenciales para el desarrollo.
En la sociedad boliviana existe una laguna, un vacío, entre el sistema ético establecido y su cumplimiento. El tratamiento de estas cuestiones por parte de la iglesia tiene que ver obviamente con el tamaño de la laguna. Una amplia identificación entre los miembros de una sociedad fortalecerá el impacto del sistema ético, pero cuando el radio de identificación y la confianza es reducido, puede que no haya ningún sistema ético que funcione.
El rigor del sistema ético efectivo conformará las actitudes acerca de la justicia, que son fundamentales para diversas cuestiones esenciales del desarrollo.
Si los miembros de una sociedad esperan injusticias, las ideas de cooperación, compromiso, estabilidad y continuidad se verán socavadas. La corrupción y el nepotismo se verán estimulados y se debilitará la autodisciplina necesaria para mantener a una sociedad en buen funcionamiento (pago de impuesto, resistencia a la tentación de robar, etc.).
El sistema jurídico criminal y civil se verá politizado y corrompido y la ciudadanía no lo tomará en serio. La idea de la justicia es también esencial para los asuntos sociales fundamentales: equidad en la distribución de los ingresos, disponibilidad de oportunidades educativas, los servicios de salubridad y la promoción por méritos propios.
Las actitudes sobre el trabajo están relacionadas estrechamente con estas ideas pero, particularmente, con la futura orientación. Si la idea de progreso se encuentra bien adentrada en la cultura de la sociedad, se presume que la planificación y el trabajo duro serán compensados con un aumento de ingresos y un mejoramiento de las condiciones de vida
En Bolivia el enfoque de desarrollo está centrada en el presente, en la supervivencia cotidiana y por eso el techo, la única finalidad del trabajo es la necesaria para sobrevivir.
Fundamentalmente son siete las condiciones que estimulan la expresión de la capacidad creativa humana, que tomadas en conjunto describen a una sociedad que funciona, de las cuales desgraciadamente, ninguna está presente en Bolivia a saber:

1. La esperanza de un trato justo
2. La disponibilidad de oportunidades educativas
3. La disponibilidad de servicios de salud
4. Estímulo a la experimentación y la crítica constructiva
5. Equiparamiento de las habilidades y trabajos
6. Recompensa por méritos y éxitos
7. Estabilidad y continuidad


Las siete condiciones existen sustancialmente en los quince países, cuyo producto nacional bruto per cápita es el más alto del mundo y que abarcan el 83% de los premios Novel.
Muchos economistas, politólogos y sociólogos han estudiado el fenómeno de las causas de la pobreza en el mundo y muchos de ellos han llegado a la conclusión de que las culturas son mejores o peores según el grado en que apoyen las habilidades humanas innatas a medida que éstas surjan.
El economista sueco Gunnar Myrdal, llegó a la conclusión de que los factores culturales son los principales obstáculos para la modernización de la sociedad. Como ejemplo, trae a colación el fenómeno de la pobreza en Asia, que por el grado de miseria que sufre es muy parecido a Bolivia.
Myrdal afirma que se cree que la gente de Asia es más espiritual y menos materialista que los occidentales, son desprendidos y dispuestos a despreciar la riqueza y el confort material. Soportan la pobreza con ecuanimidad e incluso ven ellas virtudes positivas. Tienen un respeto especial por el aprendizaje y capacidad para la contemplación y la meditación. Su fuerza intelectual radica más en la intuición que en la razón y el frío cálculo. En los asuntos cotidianos su principal criterio es el valor moral de una persona o de una política y se sienten aptos para censurar la conveniencia y el oportunismo en política.
Sin embargo, continúa Myrday, con la preocupación espiritual y la salvación personal por encima de todo, el mundo exterior adquiere un aspecto ilusorio y transitorio. La actitud hacia el medio tiende a ser intemporal y, por lo tanto, despreocupada e incluso fatalista.
Asimismo ya Nerhu decía que la grandeza espiritual o de cualquier otra clase no se puede basar en la falta de libertad y oportunidades, en el hambre y la miseria. Al referirse a los campesinos de su país (muy parecidos a los bolivianos por su miseria) afirmaba que viven aplastados y explotados durante innumerables generaciones y solo se diferencian ligeramente de los animales que le hacen compañía.
Para poder encontrar la naturaleza de la pobreza de la población boliviana hay que detenerse en su mentalidad de supervivencia, en su desinterés hacia las oportunidades que surgen para mejorar, su desprecio hacia el trabajo manual y teórico, especialmente para un patrono. Eso hace que directamente o indirectamente Bolivia vive y vivirá largos periodos de pobreza irremediable.
El crecimiento económico depende de las actitudes respecto al trabajo, la riqueza, el tener hijos, la invención, los extranjeros, la aventura y así sucesivamente, y todas estas actitudes afloran desde fuentes profundamente ubicadas en la mente humana.
Desgraciadamente, los valores y actitudes de la sociedad en Bolivia se centran en varios puntos que hacen que su sociedad no pueda desarrollarse y quede estancada durante años, en la miseria. A saber:

1. Nadie apoya el interés del grupo salvo en el caso de que sus propios intereses sean apoyados
2. Sólo los funcionarios se ocupan de los asuntos públicos
3. Hay pocas cortapisas a las actividades de los funcionarios públicos
4. Es difícil lograr y mantener las organizaciones
5. Los titulares de puestos oficiales sólo trabajan en la medida que sea necesario para conservar su puesto.
6. La ley no es acatada cuando no hay razón alguna para temer el castigo.
7. Los funcionarios aceptan sobornos cuando pueden salirse con la suya.
8. Los débiles favorecen un régimen de mano dura.
9. Cualquiera que invoque el civismo público como motivación es considerado como un farsante.
10. No existe relación alguna entre los principios políticos abstractos y el comportamiento concreto en la vida cotidiana.
11. El pueblo vota sólo con miras puestas a corto plazo.
12. Los individuos apoyan las actividades comunales sólo si hay algún beneficio directo para sí.
13. Se tiene poca confianza en las promesas de los partidos políticos.
14. Se supone que las personas en el poder son corruptas y trabajan en beneficio propio.
15. Los miembros del partido venden sus servicios al oferente más alto.

Esta línea de valores y actitudes que se practica en la sociedad boliviana lleva a la alienación política relativamente irremediable y produce un aislamiento y desconfianza sociales.

EL ORIGEN DE TODA ESTA CALAMIDAD

Existen algunas teorías que tratan de explicar el origen de la miseria en Bolivia y de la pobreza en otros países latinoamericanos que se centran generalmente en deslindar su responsabilidad como nación y culpan a otros países de su desgracia.
Así, según Carlos Rengel, un periodista venezolano, los políticos "revolucionarios " quieren limpiar a la sociedad latinoamericana de la corrompida influencia explotadora de la Europa burguesa, y, particularmente, de los Estados Unidos.
El mayor mito, y el más pernicioso para la América Latina, en opinión de este periodista venezolano, es la creencia de que la situación de los países latinoamericanos es el resultado del "imperialismo" yanqui.
En realidad el fracaso de Bolivia y de América Latina en general es fundamentalmente atribuible a la cultura hispánica.
Entre los caracteres españoles transmitidos al Nuevo Mundo se encontraba un individualismo antisocial, una aversión al trabajo y cierta afinidad por la violencia y el autoritarismo.
Para el español de antaño, el trabajo agrícola o minero lo tenían que realizar los esclavos organizados en encomiendas y más tardes en haciendas con todos los defectos y ninguna de las virtudes de la estructura socioeconómica de la Europa medieval.
"Como extrañarnos de que nuestras sociedades, hasta ayer esclavizadas, sigan lastradas por la resistencia pasiva al trabajo, propia del esclavo; por el prestigio disparatado del ocio del amo; y por un ritmo de vida
según el cual el funcionario público que nos dio cita a las tres de la tarde puede llegar a las cinco y media, o no regresar a su oficina hasta mañana.", dice Rengel con respecto a la forma de ser del latino.
El sistema mercantilista español fue también un importante obstáculo para el desarrollo de las colonias. La insistencia de los españoles para comerciar solo con la madre patria y el desaliento para promover industrias en sus colonias determinó un estancamiento económico que dura hasta nuestros tiempos.
El monopolio, el privilegio, la restricción de la libre actividad económica o de cualquier tipo son tradiciones profundamente ancladas en las sociedades de origen hispánico.
La elite hispanoamericana, según muchos pensadores latinoamericanos, es el principal portador de la cultura que ha fomentado desigualdades, las debilidades institucionales y el caudillismo tan corrientes en los países latinoamericanos.
Después de la independencia las clases dirigentes eran oligarquías que no tendrán otra preocupación ni otra meta que mantener intactas las estructuras sociales basadas en el latifundio y el peonaje. Los frecuentes cambios de gobierno, las llamadas revoluciones no serán sino perturbaciones superficiales en un agua estancada.
Por su parte, la iglesia católica tiene más responsabilidad que ningún otro factor en lo que es y en lo que no es Bolivia y América Latina.
Latinoamérica significa nada menos que el fracaso del catolicismo frente al protestantismo en la época moderna (cuando la extensión de la cultura europea en América es el hecho fundamental) o en todo caso de la ética católica frente a la ética protestante, realizada ésta última históricamente sobre todo en los EE.UU.
Para nuestro escritor mencionado, por contraste, la sociedad norteamericana (protestante en su mayoría) aparece en la práctica muchísimo más exigente de cumplimiento, en la práctica, de lo que cada cual pretende ser y es en esa exigencia, que es razonablemente efectiva, donde reside en gran parte la confiabilidad y la productividad de una parte de la población norteamericana determinante, sobre todo entre los grupos que colonizaron las regiones protagonistas de lo esencial del liderazgo y el dinamismo norteamericanos.
La diferencia entre las motivaciones que tenían los colonos ingleses de la América del Norte que vinieron al Nuevo Mundo a construir una vida nueva y la de los conquistadores españoles son muy marcadas.
En 1492, año del descubrimiento de América, España había sufrido dos experiencias físicas y moralmente destructoras: la expulsión de cientos de miles de judíos (industriales, fabricantes y comerciantes que sostenían la admirable prosperidad de Granada y emigraron de España) y diez años de sangrienta guerra contra los moros que, efectivamente, dejaron en manos españolas, el control de su propio país, pero también los hizo belicosos, codiciosos e insensibles al sufrimiento humano.

América, que estaba dormida soñando el sueño de los ociosos e inocentes, iba a ser víctima de lo que había pasado en España. Sus tierras, bosques, pájaros, todos sus tesoros nunca fueron suficientes para apaciguar la desatada codicia de las hordas merodeadoras que por espacio de 300 años convirtieron a este continente en un perpetuo botín de guerra.
Los conquistadores eran realmente la escoria de la sociedad española, interesados solo en enriquecerse rápidamente y volver a España. La mayoría de ellos era una soldadesca brutal y supersticiosa recogida en las casas de juego, tabernas, cárceles, etc.
En la carrera por obtener oro y plata, la agricultura fue abandonada. El control de los indios, su explotación fue aumentada por el sistema de encomiendas que por su crueldad fue peor que la esclavitud.
No solo fueron explotados, sino también exportados a otros lugares como esclavos. Así, aproximadamente 200.000 indios nicaragüenses fueron trasladados a Panamá y Perú, entre 1528 y finales de los años cuarenta del siglo XVI.
Muchos miles de estos indios nicaragüenses fueron a parar a lo que hoy es Bolivia, especialmente al oriente boliviano, a los departamentos del Beni y Santa Cruz. De ahí la similitud entre los actuales nicaragüenses y los cruceños y benianos, tanto en sus rasgos faciales, como en sus costumbres, música, y su forma de hablar.
Entre las tantas taras que dejaron los españoles en Latinoamérica están la corrupción de la administración pública, la desviación de fondos, etc. La honestidad es rara en la administración y provoca la hostilidad de todos aquellos que están acostumbrados a la corrupción, considerándola apropiada a un cierto status y a un cierto nivel de prestigio. La administración pública, incluidas las empresas estatales y las fuerzas armadas, tienen una estructura institucional que la hace estar más cercana a un sistema de titulaciones financieras que a un estado capitalista o socialista.

LA "CULTURA" DEJADA POR LOS ESPAÑOLES

He aquí unas preguntas a los lectores sobre la historia de Hispanoamérica:

1. ¿En que país, durante el periodo de 1814 a 1876, hubo siete Constituciones, dos guerras civiles y treinta cinco intentos militares de derrotar al gobierno (once de ellos con éxito)?
2. ¿Cuál fue el primer país que, ante el caos político y el derramamiento de sangre estableció un sistema bajo el cual los liberales y los conservadores se alternaban el poder?
3. ¿En qué país el 1% de los propietarios de tierras poseía el 42% de la tierra a principios de este siglo?
4. ¿Qué país experimentó seis revueltas campesinas y cuatro levantamientos urbanos entre 1827 y 1917?
5. ¿En que país, durante este siglo, las luchas civiles con intervención extranjera, condujeron al establecimiento de una dictadura militar que duró cuatro décadas?

El acertijo es por supuesto engañoso. La respuesta podría estar en cualquiera de los países latinoamericanos, pero en este caso es España. En cada caso la pregunta recuerda a un determinado país. La primera pregunta se refiere a Bolivia, la dos a Colombia, la tres a casi todos, la cuatro a México y la Argentina y la cinco a Nicaragua y la República Dominicana.

En el fundamento de la visión del mundo hispánico se encuentran cuatro premisas:

1. Fatalismo (la vida está formada por fuerzas que están más allá del control humano).
2. Jerarquía (la sociedad es por naturaleza jerárquica; la posición de uno depende del propio nacimiento)
3. Dignidad (la persona tiene valor e integridad intrínseca, pero eso no tiene nada que ver con los derechos, la iniciativa, la empresa o la igualdad de oportunidades).
4. Superioridad masculina (de la cual proviene el autoritarismo, el paternalismo y el machismo).

El individualismo español se aproxima a la misantropía ya que para el español no es suficiente tener el cielo garantizado para sí, debe también tener garantizado el infierno para su vecino
El conjunto de valores y actitudes que proceden del individualismo español es el fracaso de la elite española y latinoamericana para desarrollar un cierto sentido del principio de "nobleza obliga". Ese principio relacionado con el concepto de juego limpio hacen que las sociedades realmente progresen.
En su obra "Ingleses, franceses y españoles", el escritor Salvador de Madariaga toma nota de la tendencia hacia el desorden social, político y moral que con frecuencia se observa en nuestras sociedades. Son instintivamente hostiles a asociarse, rebeldes a la disciplina y a la técnica y acostumbrados a invertir la escala de servicios sociales a favor de los grupos que están estrechamente relacionados con el individuo.
Añade que la familia en los españoles y latinos es la más fuerte de las unidades, es autosustentada y más amplia que la inglesa o la francesa. Esta generalmente ampliada por el compadrazgo, los padrinos se escogen en el nivel social más alto de forma similar como un cliente busca a un patrón rico y poderoso.

Los latinos y el boliviano en particular tienen un desdén por el trabajo físico, por hacer dinero, por los conocimientos tecnológicos y por el aprendizaje no humanístico. Y aunque tienen que luchar para sobrevivir, por la fuerza viven vidas de esfuerzo monótono y de trabajo penoso.
Para la aplastante mayoría de los bolivianos, son penosas todas las ocupaciones impuestas por la necesidad. Gravitan sobre nuestra existencia magullándola, triturándola y lo que más nos atormenta del trabajo es que al llenar el tiempo de nuestra vida, nos parece que nos la quita, es decir, el tiempo empleado en el trabajo parece no ser nuestro y que nuestra vida esta siendo aniquilada por él hasta el extremo de que "quien trabaja lo hace con la esperanza más o menos tenue de ganar con ella un día la liberación de su vida, de poder en su hora dejar de trabajar y comenzar de verdad a vivir", como dijo Ortega y Gasset.

Otra característica propia del boliviano está en su actitud hacia el mañana, típica del estereotipo latinoamericano. Existe la tendencia a posponerlo todo a un remoto mañana. Ante cualquier requerimiento el boliviano responde con un gangoso mañana.

LA INFLUENCIA DECISIVA Y NEGATIVA DE ESPAÑA EN AMERICA LATINA Y BOLIVIA

Existe clara evidencia de la profunda y negativa influencia española a la cultura americana en general y a la boliviana en particular.
En su libro "Cultura y Conquista", George Foster examina los patrones en los que la cultura española ha suplantado esencialmente a la cultura indígena a lo ancho del espectro de la actividad humana, desde la labranza y la pesca a la organización de ciudades y las técnicas de partería. Por supuesto que las culturas indígenas han sobrevivido y continúan influyendo sobre la cultura nacional sobre todo en Bolivia, México, Guatemala, Perú y Ecuador.
Sin embargo, las características de origen español que tienen origen en la época de la conquista confieren a toda Hispanoamérica una unidad cultural común, aunque cada país independizado tenga sus características peculiares.
Los patrones de comportamiento de la mayoría de los bolivianos son los mismos que existían en España de los siglos XVI y XVII, entre estos patrones que definen su modo de ser están:

INDIVIDUALISMO: A diferencia del concepto norteamericano de individuo que radica en una forma política, económica y social de mirar al individuo que lleva a la igualdad de oportunidades y a la conciencia social, el concepto hispanoamericano se centra en la dignidad, el honor y el alma, desalentando la democracia y permitiendo al individuo o a un grupo de ellos tomar ventaja de otros y explotar, antes que cambiar la sociedad. "Ese no sentirse cada cual parte de un todo y comprometido con un destino colectivo. Al proyectar este individualismo a toda la sociedad se crea algo como los Estados Desunidos de América Hispana, como fruto de la dictadura y la separación, opuesto a los Estados Unidos de la América anglosajona" dice Rengel.

CAUDILLISMO Y MACHISMO: Aunque la autoridad se puede burlar, el poder como el que ejerce el caudillo político, el hombre fuerte, el implacable aunque exitoso general u hombre de negocios es respetado y deseado.
No se necesita investigar mucho para encontrar expresiones políticas autoritarias y de otra clase. La atmósfera general de dictadura, su preocupación por el poder personal y por la agresividad, su desprecio por los derechos de los individuos, existió desde el principio.
Tampoco es difícil no percibir la similitud entre la figura del macho y la del conquistador español.

LEY CONTRA PERSONALISMO: La escasa relación de la ley respecto a la realidad en Bolivia y América Latina en general se comenta a menudo. Debido a una larga tradición autoritaria de la Iglesia y el Estado, las leyes y los reglamentos con frecuencia se consideran asuntos que han de ser evitados y se siente satisfacción por un individualismo y una libertad de espíritu y acción que se aproxima a la anarquía.
El personalismo es generalmente la base sobre la cual operan el gobierno y también los negocios. La ley tiene una vida propia, es un sujeto académico, separado de la realidad por la suposición continua de que su significado y aplicación están en duda. Los negocios de rutina se llevan a cabo al borde de la ley, en honorarios y sobornos, en lealtades personales, en códigos de honor, en evasiones de impuestos y en desfalcos.
Todas estas actividades continúan siendo consideradas naturales y previsibles, como en el periodo colonial. Las constituciones liberales y democráticas sirvieron simplemente como adornos para la supervivencia del sistema colonial. Y esta ideología liberal y democrática, lejos de expresar nuestra situación histórica concreta, la enmascaró y la mentira política se estableció casi constitucionalmente. El daño moral ha sido incalculable.

RIGIDEZ SOCIAL: Ni las revoluciones, ni los alzamientos subvirtió el orden social existente bajo la colonia. Las clases inferiores permanecieron subordinadas y solo se produjeron cambios importantes entre los criollos y los peninsulares en el nivel superior de la escala social. Esa estructura social establecida en el siglo XVI sigue lastrando la sociedad boliviana y latinoamericana en general hasta hoy, siglo XXI.
Como en la sociedad española, hoy se intenta cuidar que los cambios no rompan el orden social, las condiciones de inmovilidad y la distribución del poder económico, político y social que caracteriza el orden tradicional.

ACTITUDES ACERCA DEL TRABAJO: A diferencia de la actitud tradicional de las sociedades predominantemente protestantes, los bolivianos y latinos en general no piensan que el trabajo sea un valor positivo; se le considera como un mal necesario, algo que la gente tiene que hacer para vivir, pero algo que ha de evitarse si es posible.

ESTADOS UNIDOS Y LATINOAMERICA

Los intelectuales de Latinoamérica y de los Estados Unidos han desarrollado la "teoría de la dependencia", buscando justificar de algún modo el fracaso de los países de origen hispano ante los países del Norteamérica. Esta teoría culpa a los Estados Unidos sobre todo de todos los males de América Latina y se resume en que América Latina es pobre porque los Estados Unidos son ricos; gran parte de los latinoamericanos no come porque los americanos comen demasiado o E.U cobra mucho por sus productos y obtiene materia prima barata.
También se escucha a menudo que las transnacionales norteamericanas desangran a América Latina e imponen gobiernos a su antojo para perpetuar su posición privilegiada.
Si bien hay poco de verdad en estas premisas, en lo fundamental son teorías totalmente equivocadas y constituye un gran impedimento al progreso de América Latina, porque la economía americana es esencialmente autosuficiente y las cifras de su economía demuestran que la mayor parte del crecimiento de los Estados Unidos se le puede atribuir a su producción propia y a su mercado interno.
Solo la ciudad de Springfiel en Massachusetts es un mercado mayor al de toda Centroamérica y la mayor parte del comercio se lleva con los países desarrollados y una ínfima parte de ella se lleva a cabo con América Latina.
Un análisis racional de la influencia de las transnacionales norteamericanas y de otros países es en la economía latinoamericana nos demuestra que ayudó más a su crecimiento que a su dependencia y que la teoría de la independencia es más un mito que una realidad. Tanto América Latina como Norteamérica están dotados de grandes riquezas e iniciaron el siglo XIX, a grandes rasgos, en las mismas condiciones económicas que América Latina. Pero, mientras a finales de siglo Norteamérica se había convertido en potencia económica, gracias a la inversión europea, los países de América Latina eran las mismas sociedades estancadas, explotadoras e injustas que habían sido desde el siglo XVI, cuando eran colonias ibéricas.
¿Explica la teoría e la dependencia las corrientes militaristas, el autoritarismo y la inestabilidad política, comunes a la mayoría de los países latinoamericanos en los siglos XIX y XX?¿ Explica esta teoría el terrible analfabetismo que abunda aun hoy en el siglo XXI y los graves problemas de salud pública?
Volviendo al escritor y periodista venezolano Carlos Rengel: "la historia latinoamericana ha estado determinada principalmente por la cultura hispana y que dicha historia fue hasta hoy un fracaso".
Las razones de tal fracaso son:

1 El éxito desmesurado de los Estados Unidos en el mismo continente y en el mismo tiempo histórico
2- La incapacidad de la América Latina para la integración de su población en nacionalidades razonablemente coherentes y cohesivas, en donde esté mitigada, sino ausente, la marginalidad social y económica
3- La impotencia de América Latina para la acción externa económica, política y cultural, etc. y su consiguiente vulnerabilidad a acciones e influencias externas e cada una de esas áreas.
4- La notoria falta de estabilidad de las formas de gobierno latinoamericanas, salvo las fundadas en el caudillismo y la represión
5-La ausencia de contribuciones notables latinoamericanas a las ciencias, las artes o las letras (lo que existe son excepciones).
6- El crecimiento demográfico desenfrenado, mayor que de cualquier otra área del planeta
7- El no sentirse Latinoamérica indispensable, o ni siquiera demasiado necesaria.

Analizando la historia del Nuevo Mundo vemos que en 1700 el Imperio Español de América era incomparablemente más rico, más poderoso y prometedor que las colonias inglesas del norte, donde se enfrentaban graves obstáculos en la formación de un estado federal.
Sin embargo, pocos años después, Norteamérica ya experimentaba un crecimiento acelerado. Francisco de Miranda, también venezolano, viajó en ese entonces por los Estados Unidos y relata la convivencia de los norteamericanos en una parrillada de esta forma: " Comieron y bebieron los primeros magistrados y gente del pueblo, dándose las manos y bebiendo de un mismo vaso. Es imposible concebir una asamblea más puramente democrática..."
Al asistir a la Cortes de Justicia en Carolina del Sur, que son públicas, según costumbre británica, se admira de la democracia que reina en los Estados, con sus poderes ejecutivo, legislativo y judicial distintos y realmente soberanos, en contraste con el sistema español.
En Filadelfia se maravilla de desembarcar "sin ceremonia alguna ni registro" y al viajar a Nueva York se admira de la prosperidad de Nueva Jersey, de la robustez de sus habitantes, y de la agricultura, "donde no hay un solo rincón donde no haya una casa". "Jamás encontré un individuo desnudo, hambriento, enfermo u ocioso. El territorio está dividido en pequeñas parcelas llamadas farms y está muy bien cultivada y el número de casas es mucho mayor, aunque no suntuosas, como en otros países". "...Sobre las costas el terreno es arenoso y pobre, pero el pueblo industrioso, bajo el influjo de un gobierno libre, la hacen prosperar a pesar de todos los inconvenientes", relata.
Mas adelante se maravilla de Boston: "donde está permitido todo lo que no se prohibe expresamente y se presume la buena fe de cada cual, mientras no haya motivo de sospechar lo contrario". "Solo había que decir que los baúles no contenían nada prohibido y lo dejaron pasar al instante", expresa con admiración.
Finalmente en Massachusetts, hace observaciones parecidas.
Estas sencillas verdades sobre origen de la prosperidad y el poder de los Estados Unidos antes de toda relación con América Latina, han sido hoy sustituidas por entorchadas explicaciones sobre cómo el auge norteamericano estaría en relación directa con el atraso del resto del Hemisferio, cuya explotación por los yanquis sería la causa principal, y hasta única, tanto de la riqueza norteamericana como de la pobreza latinoamericana, del éxito de ellos y de nuestro fracaso. Y si alguien lee esta parte del diario de Miranda debe ser en secreto, porque nadie lo cita, nadie lo comenta. Es incómodo, se vive de mitos, afrentar la verdad, dicha en forma tan simple, tan clara, irrefutable. Y para colmo por uno de los auténticos héroes y uno de los más grandes hombres de Hispanoamérica.

Pero, también el Libertador Simón Bolívar dio su juicio final sobre América Latina, en un discurso que pronunció en 1830, antes de morir dijo: "He mandado veinte años, y de ellos no he sacado más que pocos resultados ciertos. La América Latina es ingobernable para nosotros, el que sirva una revolución ara en el mar. La única cosa que se puede hacer en América Latina es emigrar. Este país (se refiere a la gran Colombia, luego fragmentada entre Colombia, Venezuela y Ecuador) caerá infaliblemente en manos de la multitud desenfrenada para después pasar a tiranuelos casi imperceptibles de todos los colores y razas, devorados por todos los crímenes y extinguidos por la ferocidad, los europeos no se dignarán conquistarnos. Si fuera posible que una parte del mundo volviera al caos primitivo, éste sería el último periodo de la América Latina".
En 1879 Estados Unidos era un país productor sobre todo de materias primas, minerales y agropecuarias y no participaba prácticamente en el comercio internacional salvo como exportador de esos productos, es decir, eran las mismas condiciones de las cuales se asegura que hoy son la causa principal del atraso de América Latina.
En la primera guerra mundial, Estados Unidos ya era una potencia mundial, había construido el canal de Panamá y derrotado a la más poderosa marina de ese tiempo, la española.

LA DIFERENCIA ESTÁ EN EL MODO DE SER DE CADA CUAL

Costa Rica es diferente a Nicaragua, como también lo es con respecto a todos los países hispanos porque los costarricenses son diferentes a los nicaragüenses. Nicaragua y la República Dominicana no se han aislado tanto de la corriente central de la cultura hispana como Costa Rica, sus respectivas historias se parecen mucho entre sí y a la de España, sin embargo sus niveles de desarrollo son totalmente diferentes. Ambas están bastante detrás de Costa Rica.
Al mismo tiempo, la República Dominicana está mucho más adelantada que Haití, con la cual comparte una isla. Sin embargo, como colonia francesa estaba más adelantada que el Santo Domingo español. Hoy en día Haití, junto a Bolivia son los países más pobres de América Latina. Su standard de vida está mucho más cercano de Africa subsahariana, donde están las raíces del pueblo haitiano.
Asimismo, las raíces de Barbados están en el mismo suelo africano y los barbadenses fueron esclavos en el Nuevo Mundo, pero sus amos no eran españoles, eran ingleses y los esclavos resultaron a la larga ser beneficiarios del concepto inglés de "nobleza obliga" desde principios del siglo XVIII. Este dominio inglés continuó hasta 1966, aunque el gobierno colonial se hizo cada vez más ilustrado en consonancia con la propia marcha de Gran Bretaña hacia una democracia moderna.
Hoy Barbados es uno de los países más adelantados del Continente, porque es mucho más inglesa que africana, a pesar del color de su piel.
Si nos trasladamos al sur, vemos que Argentina, por ejemplo, mucho más grande y rica que Nicaragua, la República Dominicana y Costa Rica juntos se encuentra en la misma corriente cultural hispanoamericana. Si la dotación de recursos puede dar origen al progreso económico y a la democracia en cualquier país, ese país debería haber sido Argentina, pero no es así.
Australia, al igual que Argentina, tiene muchos recursos naturales. Su nivel de desarrollo económico fue comparable al de Argentina hasta 1930. Sin embargo, actualmente Australia a dejado muy atrás a Argentina y ha mantenido un ritmo de desarrollo, similar al de los países occidentales industrializados. Hoy en día Australia es el país que ha conseguido más éxitos en el mundo, con una democracia sólida, una justicia social envidiable y un incremento continuo de la prosperidad. Algo similar ocurrió en Canadá y Estados Unidos. Por todo ello, es difícil no llegar a la conclusión de que la cultura británica ha desempeñado un papel decisivo para lograr el desarrollo al que llegaron estos tres países.
La visión que cada sociedad tiene del mundo afecta indiscutiblemente la cohesión de cada sociedad, su inclinación hacia la justicia y el progreso, que logra despertar la potencial creatividad humana.
En el caso de América Latina y de Bolivia en particular, vemos un modelo de cultura tradicional hispana, que es antidemocrático, antisocial, antiprogresista, antiempresarial y, al menos entre la elite antilaboral.
Todo lo visto hasta aquí nos conduce invariablemente a confirmar que el desarrollo humano se ve frustrado en Bolivia y en la mayoría de los países hispanoamericanos (y del Tercer Mundo) por una forma de ver el mundo, heredada de los españoles, que impide conseguir el pluralismo político, la equidad social y el progreso económico dinámico. Esta forma de ver el mundo ha sido conducida, sin desviaciones de importancia, por el ímpetu de los siglos.

¿QUE HACER PARA CAMBIAR?

Que la cultura cambia es evidente, pues algo sucedió en Costa Rica que hizo a los descendientes costarricenses de colonizadores españoles diferentes de los que se asentaron en otras regiones.
Los esclavos de Haití y los de Barbados procedían esencialmente de la misma cultura africana. Hoy son dos cultura profundamente diferentes. Pero, ¿qué pueden hacer las sociedades para garantizar que sus valores y actitudes hacia el mundo que les rodea cambien y aceleren el progreso?
Al plantear esta pregunta cruzamos la frontera del conocimiento científico.
Si partimos de la premisa de que es la cultura, la mentalidad y la forma de ver el mundo lo que hace que unas sociedades progresen y otras no, habremos avanzado ya medio camino en la solución del problema.
Para realizar un profundo cambio cultural y poder identificar aquellos valores y actitudes que impiden el desarrollo y otros que necesitan ser introducidos o fortalecidos, es necesario una verdadera revolución cultural, lo que significa una sincera introspección nacional que produzca un conjunto de objetivos para conseguir ese cambio. Entre esos objetivos se pueden distinguir los siguientes:


La Dirección

A través de la historia surgieron ciertos lideres que cambiaron los valores y actitudes de sus sociedades, entre ellos están Lenin, Lincoln, Roosevelt, Ghandi, Mao y en América Latina Fidel Castro y Rómulo Betancourt y si bien los cambios pueden no haber sido positivos para todos, lo importante es que estos lideres cambiaron la historia de sus países, influyendo en los valores y actitudes de su sociedad.
Si los lideres están convencidos de que los factores culturales son importantes obstáculos para el progreso, harán del cambio cultural una parte esencial y prioritaria de su programa de gobierno, acudiendo a discursos, campañas anticorrupción y a los programas legislativos que impongan un cambio social. También se puede, por medio del ejemplo, contribuir a cambiar las expectativas populares simplemente viviendo, tratando civilizadamente con la oposición y siguiendo una política que estimule la participación de todos en torno a un sentido de patria o pertenencia a algo.

La Reforma Religiosa

Como se explicó anteriormente, la religión es un poderoso determinante de la cultura. Si bien no todos pueden estar de acuerdo, me parece muy evidente que el protestantismo en general y el calvinismo en particular, han desempeñado un gran papel en el éxito de muchas naciones industrializadas y en otras de ingresos medios superiores como Trinidad y Tobago y Barbados.
Las religiones tradicionales, como el catolicismo, aunque pueden ayudar a la gente a soportar la vida cerca de los límites de la supervivencia, con frecuencia obstruyen el camino del progreso, aunque los feligreses deseen este progreso. El vudú en Haití es una de ellas.

La reforma religiosa puede constituir un poderoso agente de cambio cultural positivo si:

1- Reafirma el futuro y el concepto de progreso
2- Estimula un código ético que ayude a ampliar el radio de confianza de una sociedad
3- Desaliente el autoritarismo en su misma iglesia
4- Estimule la creencia de que los seres humanos pueden controlar sus destinos.

Obviamente esta es la parte más difícil del cambio porque de por medio está la interpretación fundamental de la relación entre deidades y seres humanos. Las viejas tradiciones de una Iglesia suelen estar determinadas por gente mayor. Por otra parte, la cultura puede cambiar sin que la religión quede comprometida y la incapacidad de la religión para mantenerse al frente o encabezando tales cambios puede comprometer su influencia.

La Educación y la Instrucción

La educación es un poderoso elemento del cambio cultural. Ella puede hacer que la cultura sea rígida, aunque también progresista. La educación en los países de América hispana hace ambas cosas. Proporciona a las masas abandonadas los instrumentos indispensables para la movilidad económica y social pero también refuerza la visión tradicional que tienen del mundo tanto la elite como las masas a todos los niveles del sistema educativo, mediante el uso de técnicas pedagógicas autoritarias, incluido el dictado con memoria repetitiva y la represión de la disensión.
Para el cambio cultural es indispensable una pedagogía participativa con técnicas que estimulen la iniciativa y cooperación en los niveles inferiores del sistema educativo y ponga énfasis en los seminarios y ejemplos en los niveles superiores.
Hace muchos años, Venezuela se preocupó hasta tal punto de la forma cómo aprendían sus niños que creó en Ministerio para el Desarrollo de la Inteligencia Humana. La responsabilidad del entonces Ministro de Educación consistía en enseñar a los niños venezolanos a pensar.
Hay que tomar en consideración que las matemáticas que enseñan en Harvard, en Moscú o en Tokio son las mismas que se enseñan en Caracas, La Paz o París y el potencial de los estudiantes es el mismo. ¿Porqué entonces los resultados son tan diferentes? ¿Porqué los grandes científicos, ganadores de premios Novel y eminencias en sus disciplinas salen de universidades de países industrializados y no de las universidades de Hispanoamérica? Creo que la respuesta está en la forma de concebir la educación. En aquellas a los estudiantes se les ha enseñado a pensar.
El objetivo de un nuevo programa de aprendizaje debería desarrollar una disposición para aceptar nuevas ideas, probar nuevos métodos; una presteza para expresar opiniones; un sentido del tiempo que hiciera a los hombres más interesados en el presente y en el futuro que en el pasado; un mejor sentido de puntualidad; una mayor preocupación por la planificación, la organización y la eficacia; una tendencia a ver el mundo como algo calculable; una fe en la ciencia y la tecnología y, finalmente, una creencia en la justicia distributiva.

Los Medios de Comunicación Social

En los últimos años, la visión que la gente tiene del mundo se ha visto cada vez más influida por la radio, la televisión, el cine y en algunos sectores por los periódicos y las revistas. Estos medios son importantes modeladores de los valores y actitudes populares. Pueden contribuir a la formación de un consenso nacional sobre el cambio cultural y también desempeñar un papel clave en el mismo proceso de cambio.
El cambio cultural necesita de todos los medios posibles de comunicación para que sea efectiva y por ello los últimos avances en materia de computación, Internet y todo lo que pueda inventarse tiene que tomarse muy en cuenta para lograr el cambio de mentalidad de grandes sectores de la población.

Proyectos de Desarrollo

Los especialistas que conciben proyectos de desarrollo pueden estar en situación tanto de incrementar la efectividad de tales proyectos, como de fomentar el proceso de cambio cultural, considerando las implicaciones culturales de lo que están haciendo.
Los proyectos de desarrollo fallan o fracasan con frecuencia, poco antes de alcanzar sus objetivos, porque se ignoran los valores y actitudes de los beneficiarios a los que va dirigido.

Entre otras, es necesario:
- Programas para ampliar el numero de sociólogos bien entrenados
- Programas para la investigación de valores y actitudes de un pueblo
- Promoción de cooperativas agrícolas, organizaciones de desarrollo comunitario y otras asociaciones basadas en el interés mutuo.
- Proyectos que estimulen el diálogo entre los grupos de trabajo, comerciales e intelectuales y entre los partidos políticos
- Proyectos que identifiquen y entrenen líderes
- Programas de educación e instrucción que expongan a la gente culturas más progresistas
- Esfuerzos para descentralizar el poder gubernamental y la adopción de decisiones.

Un excelente ejemplo de un programa de desarrollo bien llevado es el realizado en una cooperativa lechera en la India (en el Estado de Gujarat), denominado Anand, que ha modernizado las actitudes y valores de la gente.
Un grupo de productores de leche que buscaba protegerse de los intermediarios formó una cooperativa que creció hasta abarcar a cientos de miles pequeños productores (la mayoría tenía no más de una o dos cabezas de ganado). Los productores, ayudados por sus esposas e hijos, llevan la leche a los centros de acopio convenidos dos veces al día. La cantidad de leche, su pureza y su contenido en grasa se miden utilizando instrumentos modernos y se les paga diariamente a los productores. También se les proporciona comida científicamente preparada para sus animales a precios razonables y reciben asistencia técnica de veterinarios calificados. La cooperativa mantiene un consorcio de criadores de ganado de alta calidad y los productores utilizan ampliamente la inseminación artificial. Esto es absolutamente increíble teniendo en cuenta que en la India la vaca es un animal sagrado.
Los miembros de esas cooperativas han experimentado un sustancial aumento en sus ingresos y cada día se producen cambios en la forma en que estos campesinos ven el mundo, una nueva lección de tecnología moderna y de juego limpio y cada día hay una mejor recompensa para el trabajo arduo e inteligente.
La participación de las cooperativas al nivel de aldea constituye una enseñanza práctica de democracia. Las actitudes sobre salud, nutrición y dimensiones familiares han cambiado. Los antiguos patrones sociales se han quebrado: hace unos veinte años los intocables formaban filas separadas; hoy en día las filas separadas no existen.
Hoy Anand es un floreciente complejo de actividades, produce una amplia variedad de productos, que incluye alimentos de alto valor proteínico para niños, chocolate. Ha engendrado además una prometedora cooperativa de semillas oleaginosas, un programa de cuidados de salud primarios, una escuela para graduados en administración rural. Invierten dinero en lecherías gubernamentales deficitarias y las convierten en modernas, eficaces y rentables.
Esto demuestra que el cambio cultural puede ser el resultado de actividades de desarrollo que comprometen a sus participantes en formas progresistas de organizar la empresa humana.

Las Prácticas Administrativas

La industrialización, objetivo nacional en la mayoría de los países pobres, puede ser también de por sí un poderoso instrumento de cambio cultural. Dentro de ese marco, el administrador que explique más que ordenar, que aliente la comunicación en su organización y recompense la iniciativa, puede crear un medio en el cual los trabajadores sientan que son reconocidos por sus superiores; las responsabilidades y un cierto grado de autonomía son de verdad delegadas por todos los niveles de la administración; todos los niveles del personal se identifican con sus puestos, con la empresa y con sus objetivos; los trabajadores cooperan entre sí de buen grado y con todos los niveles de administración en la búsqueda de ventajas materiales personales, pero colectivas. Los individuos son libres de discutir los problemas que surgen en sus trabajos con los superiores y sus compañeros y aprovechan las oportunidades.
Pero, los pueblos de cultura española que se ven expuestos por primera vez a una administración democrática moderna no experimentan cambios importantes en sus valores, cultura y mentalidad pero su ansiedad, rencor, su rabia y represión forzada durante las horas de trabajo pueden haber disminuido considerablemente. Sobre todo la gente no necesitará descargar sus temores, rabia y agresión sobre sus subordinados o hijos.

Las prácticas de crianza infantil

Cualquier cambio en los valores y actitudes de los padres introducido por los dirigentes políticos, las iglesias, la escuela y los medios de comunicación, etc., deberían ser sustancialmente transmitidos a sus hijos de esta forma. Pero el progenitor socializa al niño de otra forma que puede ser mucho más importante para el cambio cultural y mucho menos susceptible de modificación.
En opinión de psicólogos y sociólogos, la forma en que el padre se comunica con el hijo puede ser más importante que lo que quiere decir. La forma en que la madre y el padre tratan al hijo puede ser el principal determinante de la propia imagen y de la confianza en sí mismo que adquiere el niño, de la estabilidad emocional, del juicio, del grado de optimismo, de la capacidad y motivación para el éxito y de un sentido de confianza. Todas esas características son de trascendental importancia para los individuos como para las sociedades.
En Bolivia una poderosa inercia mantiene las técnicas de los padres de una generación a la siguiente y por ende el niño consciente o inconscientemente está preparado de la misma forma para el papel de progenitores que tendrá que asumir más tarde, si es que llega a sobrevivir. Puede que haya una visión muy diferente del mundo entre una generación y la siguiente, pero el carácter entre padre e hijo es muy similar por razones genéticas y debido a la inercia que le transmite el padre. Por lo tanto, la creatividad, la adaptabilidad social y el juicio tiene mucho que ver con la forma en que funciona la sociedad en la realidad. No es en absoluto extraño que alguien que cree en las relaciones interpersonales democráticas sea autoritario debido al daño emocional y psíquico heredado por padres autoritarios.
Si bien todos necesitan estudiar más a fondo el problema de la educación paternal exitosa, existe evidencia de que las prácticas de crianza de niños influyen mucho en la cultura, que ningún país preocupado por el progreso de su sociedad puede permitirse ignorar esta cuestión.

Además de lo expuesto anteriormente, se tiene que tener muy en cuenta que el desarrollo de los países se ve afectado también por factores no culturales y dificultades monumentales que son necesarias de superar para acelerar un cambio cultural constructivo.
Sin embargo, si como vimos, el desarrollo es en gran medida un estado mental, una forma de concepción del mundo, una mentalidad, si se quiere progresar no hay más elección que por lo menos intentar el cambio.

Vladimir Ramírez T.
Periodista boliviano

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