El
transporte y otros "fenómenos" típicamente rusos
Moscú
no tiene servicio de taxis
Moscú, Abril,
Vladimir Ramírez.-Increíble,
pero cierto. Nadie sabe explicar el porqué, pero en Moscú
no hay un servicio regular de taxis! Si usted llega al aeropuerto o simplemente
quiere trasladarse de un lugar u otro en esta gigantesca ciudad de diez
millones de habitantes no podrá hacerlo salvo que hable bien el
idioma ruso y domine los trucos para poder "encontrar" un taxi.
Debido a la difícil situación económica que atraviesan
los moscovitas, cualquier automóvil privado le trasladará
como taxi en cualquier momento y lugar. Para ello se debe extender la
mano y esperar pacientemente algunos minutos hasta que alguno se detenga
o caso contrario, la espera suele prolongarse mucho. Una vez detenido
el "taxi", el chofer esperará que usted abra la puerta
para rogarle que lo traslade a su destino porque, según la distorsionada
forma de interpretar las cosas en Rusia, no es el cliente quien hace el
favor de comprar un servicio, sino al contrario, a usted "le hacen
el favor" de venderle u ofrecerle un servicio. Luego deberá
preguntar si puede llevarlo y cuanto le costará (como no hay un
servicio normal de taxis ni ningún código que norme su trabajo
y las tarifas, usted esta en absoluta dependencia de la voluntad del improvisado
taxista).
Si usted quiere trasladarse del principal aeropuerto hasta la ciudad (cerca
de 30 Km.) la suma a cobrarle oscilara entre 60 a 100 dólares americanos,
dependiendo del automóvil y de la codicia del taxista o de la mafia
que los organiza.
Dentro del área metropolitana los precios varían de acuerdo
a la distancia, pero trasladarse en taxi por Moscú es por lo general
muy caro, mínimo un dólar y medio por un tramo corto de
no más de un Km.
Moscú es una ciudad gigantesca y peligrosa, existen casos de desaparición
de turistas que fueron despojados de sus pertenencias camino del aeropuerto
y luego "eliminados", según la terminología de
la milicia (policía) moscovita.
Si esta pensando visitar Moscú en calidad de turista prepárese
mentalmente a pasar éstas y las más increíbles y
desagradables peripecias, impensables en cualquier otra ciudad de Europa.
Sus sorpresas se iniciaran en el principal aeropuerto de Rusia "Sheremetievo-2",
un viejo y lúgubre lugar, donde le darán la "bienvenida"
los agriados milicianos o agentes de civil (policías) que no le
quitaran la vista de encima hasta que usted se haya alejado de su área
y ello dependerá de la rapidez para pasar el control de su pasaporte
que generalmente es por lo menos una hora.
Luego, un funcionario de migración realizará un largo, tedioso
y minucioso análisis de sus documentos y de sus facciones cual
si fuera un experimento psicológico, fijando su vista en usted
y en sus documentos alternadamente y durante varios minutos (para el colmo,
los funcionarios que controlan los pasaportes muy rara vez saben lenguas
extranjeras).
Pero ahí no termina el suplicio, si algo para ellos no esta claro
irá personalmente y con desesperante parsimonia y aparatosidad
a preguntar a "alguien" más entendido. Mientras tanto
usted queda ahí parado, evidentemente nervioso, tratando de adivinar
cual es el problema y si pasa la revisión por poco no le arrojarán
con sus documentos en la cara y podrá ingresar al país,
caso contrario tendrá que pasar un verdadero suplicio y narrar
toda su vida a groseros y no muy bien educados agentes de migración.
También pondrán a prueba sus nervios y su paciencia al revisar
minuciosa y abusivamente todas las pertenencias, porque en la aduana de
Rusia no hay leyes ni reglas que se cumplan y los funcionarios se caracterizan
por su falta de respeto y consideración para con el pasajero. En
Rusia no existe ningún mecanismo para detener o denunciar semejante
arbitrariedad y es más hace poco el propio Parlamento ruso aprobó
una normativa que autoriza a los funcionarios de la aduana en los aeropuertos
y las fronteras a revisar cosa por cosa las pertenencias de quienes ingresan
a Rusia. En cuanto a los derechos de los pasajeros no se dice nada.
Pero, volvamos a lo nuestro, una vez fuera del aeropuerto lo primero que
salta a la vista o al olfato en este caso, es el fuerte olor a gasolina
mal refinada y la impresionante contaminación sobre la ciudad,
lo segundo es la falta de normas de urbanidad de la mayoría de
los habitantes de esta gigantesca ciudad.
Particularidades del transporte en Rusia
El transporte se caracteriza por su inoperancia, mala organización
y un pésimo servicio. Existen regiones enteras donde no llega el
transporte urbano. El único consuelo es que aun hoy el servicio
de transporte urbano es todavía accesible en comparación
con otras ciudades del mundo ya que no llega a costar ni 40 centavos de
dólar.
En Moscú aún circulan viejos trolebuses, tranvías
y autobuses, algunos de los años 70 y obviamente la falta de comodidad
en el transporte es otro problema común.
En realidad en Rusia nadie vela ni por la seguridad y mucho menos por
la comodidad de los pasajeros. Los conductores transportan a la gente
como si llevaran ganado y esperar un mínimo de delicadeza y cortesía
es como pedir peras al olmo.
Uno de los más eficientes, baratos y relativamente rápidos
medios del transporte es el bullicioso metro moscovita que en la actualidad
se convirtió además en una especie de basurero de botellas
de cerveza, recorrido de mendigos y lugar preferido de miles de vendedores.
Debido a que la población rusa esta prácticamente alcoholizada
(una lata de cerveza cuesta no mas de un tercio de dólar), los
adolescentes de ambos sexos implantaron la costumbre de tomar cerveza
en botellas o en latas de medio litro en todo lugar: en las oficinas,
en la calle, dentro de los vagones del metro, en cualquier medio de transporte,
etc., dejando los envases por doquier.
El metro es también el lugar preferido de los mendigos quienes,
quienes recorren los vagones pidiendo limosna. Entre ellos pueden haber
desde jovencitas madres solteras, pasando por ancianos inválidos,
hasta jóvenes ex soldados de las guerras de Afganistán y
Chechenia que fueron mutilados y luego abandonados a su suerte por el
ejército y el país al cual sirvieron. La vida en la Rusia
actual es tan difícil y dura que, según algunos medios de
comunicación, incluso los mendigos son víctimas de mafias
que los organizan y distribuyen por toda la ciudad para explotarlos económicamente
y si alguno se atreve a salir de su circulo de poder serán extorsionados,
chantajeados, golpeados y hasta eliminados impunemente ya que nadie saldrá
en defensa de ellos.
En los pasillos del metro moscovita se puede ver con frecuencia ancianitas
que apenas se mantienen de pie pidiendo alguna moneda para sobrevivir,
la otra forma de ganarse la vida es recogiendo botellas en los basureros
para luego venderlas a un mísero precio.
El metro también es el centro preferido de revisión de documentos
por parte de la policía, acción que se realiza en todo lugar
y momento y sin que medie motivo alguno, es más, los milicianos
rusos (policías) se caracterizan por su poca educación y
grosería cuando llevan a cabo esta infame costumbre, implantada
gracias a los actos terroristas ocurridos en esta ciudad y en otros países.
Rusia:
nuevo sistema, vieja mentalidad
La
xenofobia en RusiaMoscú
no tiene Taxis
La
xenofobia en Rusia
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