París, Abril,Edwin Perez Uberhuaga.- Muchos jóvenes latinoamericanos, entre
ellos bolivianos, que estan «sin papeles » en Francia, son victimas de
explotación laboral no solamente de algunos franceses, sino también de
latinoamericanos interesados en sacar el mayor provecho de ellos.
La preocupación fue expresada por jóvenes bolivianos y colombianos, ante el
incremento del número de inmigrantes, sobre todo jóvenes, que a veces llegan
a Francia sin la orientación necesaria y que se exponen a una serie de
riesgos.
Los que estan mejor son los estudiantes, que tienen los papeles en orden y
pueden trabajar legalmente en sus horas libres, pero los que tienen un
futuro incierto son los que ingresaron como turistas y se quedaron por más
tiempo de los tres meses establecidos por las leyes migratorias.
En general, se dedican a cuidar niños y limpiar casas, en el caso de las
mujeres, y de la construcción o mensajería, en el de los hombres, pero hay
quienes son empujados a caer en la prostitución o practican la drogadicción
y la homosexualidad y trasvestismo con fines comerciales.
La estudiante paceña Claudia Viscarra dijo que en sus dos años de
permanencia en Francia escucho muchas veces de los abusos que se cometen con
los recien llegados, a los que sus empleadores les quitan sus pasaportes a
cambio de una serie de labores o a los que se obliga a trabajar por
demasiadas horas.
Dijo que a ello se suma un mayor control policial. Mencionó el caso de una
pareja de cruceños indocumentados que en 24 horas fueron deportados a
Bolivia, a pesar de no tener antecedentes de estar involucrados en actos
delincuenciales. Otros desean ir a Londres, pero no les dejan cruzar la
frontera y se quedan en Francia en situación incierta.
« Al final, todo es cuestión de suerte », dijo el colombiano Fabian Leonardo
Marroquin, que vive desde hace dos años en París, al hacer notar que tambien
los ilegales tienen algunos derechos como atención medica o posibilidades de
trabajo que, a pesar de su deficiente condición, significan buenas ganacias
con relación a la economía latinoamericana.
El colombiano dijo que hay muchos que se proclaman refugiados políticos sin
serlo realmente y perjudican a otros que si son perseguidois en sus países.
« En el trabajo, debemos competir con gente de Europa del Este e inclusive
ecuatorianos que cobran muy poco dinero por trabajar en condiciones
climaticas tremendas », señalo.
Segun el estudiante Alejandro Viscarra, que llego hace unos meses a París,
este tipo de desequilibrios e inadaptaciones se pueden notar en cambios de
conducta de muchos jovenes latrinoamericanos que caen en la drogadicción ;
libertinaje sexual y que se portan mal en las discotecas.
« Afortunadamente, la mayoria de los jovenes bolivianos no hace eso y más
bien tienen buena imagen de estudiantes y trabajadores », dijo. Lamento que,
por el contrario hay pocos compatriotas que acceden a becas porque
simplemente dentro de Bolivia esa información se reserva para la gente con
dinero o los que tienen influencias politicas.
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La cochabambina Maria Elena Zurita, tambien estudiante, dijo que es
fundamental que los jovenes interesados en migrar conozcan todas las
caracteristicas del pais al que llegaran y las posibilidades reales de
estudiar y trabajar, para no tener experiencias traumaticas. « Muchos
piensan que las cosas aqui son muy fáciles », dijo al puntualizar que cada
vez hay mas jovenes cruceños en Europa.
Por su parte, Helga Najera dijo que llegó a Francia bajo el sistema de « au
pair » o niñera, pero no recibio el trato que esperaba por parte de la
familia francesa, por lo que ahora busca otras posibilidades para estudiar
y trabajar.
EL REFUGIO DE LA FE
Segun los hermanos Viscarra, la fe se ha convertido en una importante fuente
de alivio para los problemas de los jóvenes migrantes, que cada fin de
semana se congregar para encontrar una fuente de solidaridad y apoyo
reciproco.
Bajo la definición francesa hay los cristianos católicos y los cristianos
protestantes. Los segundos, que en Bolivia simplemente se llaman cristianos,
también se reunen en París, ciudad donde hay musulmanes, budistas y creyentes de otras religiones y, por supuesto, ateos.
Alejandro, de 21 años, manifesto que ha encontrado que la revolución para
cambiar el mundo no necesariamente debe darse en el marco de la violencia,
sino en la transformacion espiritual de cada persona, que a su vez pueda
cambiar a las demas en base a la Palabra de Dios.
La cruceña Katia Ballivián de Alvarez, asegura que gracias a Dios ha logrado
estabilizarse en apenas tres meses en Francia y lograr que su esposo Johnny
se encuentre con ella, algo que muchos latinoamericanos esperan bastante
para poder lograr.
?No conocía a nadie al llegar a París, pero en el aeropuerto encontre a un
chileno que es cristiano como yo y que me alojo durante cuatro días. En este
tiempo he conseguido un lugar independiente para vivir en el centro de París
y ya tengo un empleo fijo. Mi esposo se acomodará con el tiempo?, dijo.